Se puede tener un cáncer y encontrarse bien o estar sometido a un sufrimiento e invalidez considerables sin que los médicos encuentren pruebas de enfermedad. La Medicina no ofrece respuestas aceptables para esta última situación y recurre arbitrariamente a negar la realidad del sufrimiento, haciendo aún más insufrible el calvario de los pacientes. Este blog intenta aportar desde el conocimiento de la red neuronal un poco de luz a este confuso apartado de la patología.

We may have cancer and feel good, or be submitted to substantial disability and suffering without doctors finding any evidence of disease. Medicine gives no acceptable answers to the last situation and arbitrarily appeals to denying the reality of suffering, making the calvary of patients even more unbearable. This blog tries to contribute with the knowledge of the neuronal network, giving a little light to this confusing section of pathology.

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martes, 22 de marzo de 2011

Síntomas



Un síntoma es una percepción corporal que hace referencia a un estado alterado o inconveniente.

El síntoma da la alarma, incita a una conducta y a una indagación.

El síntoma no es nada en sí mismo. Lo que importa es lo que significa.

El dolor es un síntoma. Algo sucede en la zona doliente o algo teme el cerebro que pueda suceder en ella. Habrá que indagar si, realmente, sucede algo relevante o se trata de una falsa alarma, una prevención alarmista del cerebro.

El síntoma es, generalmente, molesto, desagradable, penoso. Quien lo padece buscará el modo de librarse de él. Hay dos formas de hacerlo. Descubriendo la causa y neutralizándola o limitándose al efecto, el propio síntoma.

- Tengo hambre. Deme algo de comer...

o

- Tengo hambre. Deme algo contra el hambre...

El síntoma solicita una conducta. Si el individuo la sigue, el síntoma amaina. No siempre la conducta solicitada  conviene al organismo (por ejemplo, comer si existe obesidad).

La Medicina sintomática aporta remedios antisíntoma: antialgésicos, antiinsommios, antidepresivos, antitusígenos... y desconsidera su origen y función. La simple corrección del síntoma no quiere decir que hayamos mejorado la condición que lo causa. Probablemente suceda lo contrario.

-¿Qué tal?

- Mejor. Duele menos...

El efecto del analgésico se produce porque hemos manipulado las comunicaciones entre la zona afectada y el cerebro o porque hemos activado la expectativa de una solución (placebo). El analgésico no actúa sobre el proceso. Desconectar la alarma no impide que el ladrón robe.

El desánimo es un síntoma. Algo no va o no va a ir bien. No es aconsejable la inversión en esfuerzo.

- ¿Qué tal?

- Mejor. Estoy más animado...

De la mejoría del ánimo no se deduce que el individuo está en mejores condiciones para afrontar la adversidad ni que la hayamos aliviado.

Cuando inicié mi periplo profesional aplicando pedagogía sobre biología del dolor preguntaba por el síntoma, pensando que así sabría si la acción pedagógica había sido eficaz.

- ¿Cómo va?

- Parece que funciona. No he tenido migrañas.

Con el tiempo aprendí a desconfiar. Ya no pregunto por el dolor, por el síntoma. Me centro en el proceso.

- ¿Qué ha entendido? ¿Lo cree?

El objetivo ideal de la acción profesional es ayudar al organismo a defenderse de las situaciones adversas cuando disponemos de esa capacidad. Primero hay que identificar lo adverso: un germen, un cáncer, una carencia hormonal... o un error evaluativo cerebral y aplicar el remedio: antibióticos, quimioterapia, hormonas... o pedagogía, correctores evaluativos, información.

Los padecientes están instruidos en la Medicina sintomática. No hacen demasiadas preguntas sobre las causas o se conforman con cualquier respuesta. Lo que quieren es librarse del síntoma.

- Necesito una solución, algo que me quite el dolor para poder llevar una vida normal...

- Primero hay que saber por qué duele...

Pregunto en la consulta por las expectativas:

- ¿Qué prefiere: saber por qué duele o un analgésico eficaz?

Hay división de preferencias.

Una vez descartada una causa relevante en la zona dolorida es evidente la necesidad de actuar sobre la falsa alarma. Hay que modificar falsas creencias y expectativas cerebrales y convencer al individuo que, en caso de  error evaluativo, debe dar un giro de 180º a la conducta de afrontamiento.

- El dolor es debido a un error cerebral de valoración de amenaza. No tiene sentido que se obedezcan los miedos erróneos de su cerebro. No se meta al cuarto oscuro, no tome el tóxico adictivo, prosiga con su actividad...

No es tarea fácil. El dolor contiene el miedo ancestral de la vida a la muerte y consigue con su condición sufriente intimidar al padeciente.

- Tengo pánico al dolor. Ya sé que no pasa nada, que debiera continuar con mis tareas y no tomar calmantes pero el dolor me puede...

Los relatos de afrontamiento activo, respondón, del individuo frente a su cerebro alarmista, fóbico, son de todos los tipos. A veces gana la cordura y el dolor se disipa y otras vencen las memorias traumáticas del miedo, de las crisis previas.

- Deme algo para el dolor. Necesito una solución...

La petición es comprensible pero no deja de ser otro síntoma..

12 comentarios:

Unknown dijo...

Pero hay síntomas muy engañosos.

Angeles dijo...

Es estupendo cuando se conoce la causa de un padecimiento, el que sea, porque es el primer paso para ponerle una solución.
Los tratamientos sintomáticos (gripe) nos ayudan a pasar enfermedades que no tienen un tratamiento causal (bacterias-antibióticos), pero siempre que este sea posible, es el que debe utilizarse. Quiero decir, que en el caso de la migraña, fibromialgia, etc,si como comenta el doctor Goicoechea, hay un error de percepción por parte del cerebro, pues eso es lo que hay que tratar, la causa, porque sino estamos dando palos de ciego y no conseguimos nada, más que emperorar nuestra calidad de vida.

Lo que pasa es que nos cuesta aceptar que hay cosas que se solucionan sin pastillas, que nos puede ayudar el conocimiento y el aprendizaje, pero debemos intentarlo y cambiar el chip, como dice el doctor.
Un saludo.

arturo goicoechea dijo...

Ddmx: los síntomas no son engañosos. Expresan claramente lo que en ese momento está valorando el organismo. El picor nasal de una inflamación alérgica no es un síntoma engañoso. Nos permite saber que el sistema inmune valora peligro en un iare con polen. Así conocemos el error de valoración.

Saludos

arturo goicoechea dijo...

Angeles: el saber siempre ocupa lugar y modifica las conexiones y la química neuronal. Hay una inercia al cambio. Ello obliga a un esfuerzo y a un trabajo de superación de varios miedos. El mayor escollo es la superación del miedo al dolor, al sufrimiento.

Saludos

Unknown dijo...

Digamos entonces que hay síntomas que pueden ser malinterpretados, por ciertos docentes. Yo estuve a punto de quedarme en una silla de ruedas, porque mi médico de cabecera, dijo que tenñia gripe, y en realidad tenía meningitis.

arturo goicoechea dijo...

DDmx: lamentablemente podemos equivocarnos a veces en cuestiones fundamentales como la salud y la enfermedad

Saludos

Jaime dijo...

Hola Arturo:
Algo que he ido aprendiendo de este blog y de la experiencia del padeciente es que sintoma no es sinonimo de enfermedad...
Cuesta bastante, cierto, pero cuando las pruebas medicas dicen que no hay nada, y no hay evolucion de enfermedad sino sintomatologia que va cambiando a veces, he llegado a la conclusion de que puede ser verdad. Eso, y el hecho de seguir vivo...
Hace ya dias, despues del correspondiente electro, placa y auscultacion, el cardiologo me dijo "lo tuyo es sintomatico..." Probablemente si no hubiese leido este blog no hubiese entendido lo que me decia... Hilando un poco creo entender la diferencia entre sintoma y enfermedad... Pero a veces se echan de menos estas explicaciones en las consultas convencionales...
Curiosamente, la semana pasada he sufrido el ataque de un "virus"... Y me ha afectado tambien en lo sintomatico, a mis puntos debiles, a mi sintomatologia maldita que casi estaba en el baul de los recuerdos: Inestabilidad, parestesia, parte derecha de la cara ligeramente fria, vista borrosa...... Se ha pasado la fiebre, solo queda un poco de tos, pero "eso otro" no se va ¿es posible que cuando nuestro cuerpo esta debil un efecto memoria saque esos sintomas-temores, o que esos puntos debiles que controla nuestro cerebro se pongan de manifiesto? Me llama la atencion porque ya me encontraba bien, y curiosamente ha vuelto cuando mis defensas fisicas (y supongo que las otras) estaban bajas... Espero que no haya vuelto para quedarse ¿algun consejo...?

Salu2 y gracias, a diario, por el blog

arturo goicoechea dijo...

Jaime: me alegra saber que has tenido algún período asintomático. En los estados de alerta e hipervigilancia es frecuente que cuañquier incidencia de enfermedad "normal" pueda reactivar los recelos sobre salud y puede reaparecer el cuadro de síntomas de la incertidumbre. No pasa nada. Uno hace las debidas reflexiones y vuelve a mandar a paseo la hipervigilancia.

Saludos

Jaime dijo...

Gracias Arturo, un poco de refuerzo siempre viene bien, para fijar ideas, aunque ya sabemos que la cabra tira al monte, y volver para atras a veces puede parecer una derrota y hace tambalear la idea de "salud" que se estaba afianzando...
Espero recuperar la normalidad y el convencimiento no tardando, si he podido una vez, podre hacerlo de nuevo, digo yo...
Salu2


Jaime

María José Blanco dijo...

Hola, Arturo, dices que hay que perder el miedo al dolor, al sufrimiento, sin embargo el dolor es una alarma del organismo que surge para concienciarlo de que se debe hacer algo y es ese miedo el que le hace reaccionar, es el miedo el que salva al individuo de hacer una mala valoración del síntoma que si es muy intenso es porque algo va realmente mal, ya sea desde un punto de vista orgánico o somático que no deja de ser orgánico también. La psiquis pertenece al cuerpo tanto como el bazo o un riñón.

Una hipersensibilización al dolor me parece que no está en manos de una persona poder evitarlo sin ayuda que le permita corregirlo.

Aprovecho para felicitarte por tu blog, es claro e iluminador y muy de agradecer. Gracias.

Saludos

Arturo Goicoechea dijo...

Maria José Blanco: lo que digo es que hay que perder el miedo a la falsa alarma, a la sirena que salta en nuestra casa sin que hayan entrado a robar.

El dolor salta en muchas ocasiones por un valoración errónea de amenaza. Debemos hacer, en ese caso, todo lo posible por contabilizarlo como un error y mejorar así el aprendizaje a medio y largo plazo.

La hipersensibilización cognitiva, cultural, al significado del dolor puede ser errónea y puede y debe ser corregida.

Comparto tu reflexión de que lo psíquico forma parte del organismo.

Gracias por la visita y el comentario

María José Blanco dijo...

Gracias a ti por la dedicación y por la difusión del conocimiento.