Se puede tener un cáncer y encontrarse bien o estar sometido a un sufrimiento e invalidez considerables sin que los médicos encuentren pruebas de enfermedad. La Medicina no ofrece respuestas aceptables para esta última situación y recurre arbitrariamente a negar la realidad del sufrimiento, haciendo aún más insufrible el calvario de los pacientes. Este blog intenta aportar desde el conocimiento de la red neuronal un poco de luz a este confuso apartado de la patología.

We may have cancer and feel good, or be submitted to substantial disability and suffering without doctors finding any evidence of disease. Medicine gives no acceptable answers to the last situation and arbitrarily appeals to denying the reality of suffering, making the calvary of patients even more unbearable. This blog tries to contribute with the knowledge of the neuronal network, giving a little light to this confusing section of pathology.

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lunes, 20 de diciembre de 2010

En las antípodas



De cuando en cuando visito páginas oficiales de migraña. Reuniones solemnes en hoteles poliestrellados, con representante del gobierno, presidenta de asociación de padecientes y varios ponentes imponentes, líderes de opinión. 

En la antesala, la Industria Farmacéutica.

Se intercambian agradecimientos, se reconocen méritos. Autofelicitaciones por lo mucho conseguido y autoexigencias para conseguir nuevas metas. Hay presente y pronto, muy pronto... futuro, nuevos fármacos.

Descartes no tarda en aparecer. "Receptores del dolor"... ¡Jo!

"...El cerebro no duele..." Lo que duele son las terminaciones del trigémino en las meninges y grandes vasos...

Hay resistencia a abandonar la desacreditada teoría vasculoinflamatoria...

Se liberan mediadores inflamatorios en las meninges... meningitis aséptica... Los "receptores del dolor" se sensibilizan, generan dolor... El dolor llega al cerebro donde se hace consciente... ¡Dios!

"... Bueno, la migraña se genera en el cerebro..."

Hay bastante barullo para entender de dónde surge la tormenta migrañosa. Por supuesto son los genes pero no queda claro si su impacto es sobre el cerebro (no duele...) o sobre las terminaciones del trigémino, que sí duelen...

Quizás todo empiece por la Onda de depresión cortical propagada...  Los genes migrañosos generan hiperexcitabilidad en la corteza visual. Surge la Onda, con o sin aura, y la onda llega a sensibilizar las terminales del trigémino. ¿Cómo, por dónde...? Lo hace. Punto.

Los desencadenantes, fundamentales. Estrés, alimentos, hormonas, sueño, insommio...

¿Problemas? Varios:

1) No se hacen bien las cosas en atención primaria...

2) Faltan Unidades especializadas. Pocos fondos sin fondo...

3) Automedicación

4) Poca información. Más campañas antimigraña... Más sensibilización...

El futuro... Identificadas nuevas moléculas malas. Pronto saldrán nuevos fármacos... Estimuladores, neuromoduladores, cirugía, bótox, estimulación magnética...

Acaba la reunión. Más autoparabienes y autoexigencias. Es previsible alguna migraña entre los asistentes tras la relajación por el estrés...

Salgo de la página oficialista y vuelvo a la aldea de mi blog. Es fin de semana. Pocos visitantes... Estamos en Navidad... 

Los líderes de opinión pisan firmes. Se les ve convencidos de que hacen camino al andar, el único camino fiable, con esperanza, dedicación, interés... desinteresado (por supuesto)... científico...

Lo que dicen, hacen, proponen, sostienen y prometen no tiene nada que ver con lo que aquí defendemos. Estamos en las antípodas los unos de los otros. Vamos en dirección contraria. Conmigo o contra mí...

¿Dónde está la razón? 

El pobre Descartes erró en su teoría del dolor, señalando su origen en los tejidos, pero marcó los fundamentos de la racionalidad moderna. Ya advirtió sobre los peligros de hacer caso de los sentidos y no tener in mente a la mente y nos aconsejó dudar de la autoridad y de nosotros mismos, del demonio de las falacias con apariencia racional...

O este blog es un absoluto despropósito o algo no anda bien encaminado en los salones de la oficialidad migrañosa. O lo uno o lo otro.

YO tengo mi opinión al respecto... Supongo que ustedes también.. Lo que no valen son medias tintas...

La virtud está en el término medio... si los dos extremos están viciados. Si uno sólo está errado cuanto más nos alejemos... mejor.

8 comentarios:

LOURDES dijo...

Más de lo mismo Arturo; yo también suelo mirar de vez en cuando las revistas "oficiales" por si acaso se atisba un ligero cambio, pero nada de nada. Lo que está claro es que saldrán del congreso con las ideas muy claras para manejar la migraña, ya sabemos todos cuales, y cuál es el final también deben saberlo ya, no nos engañemos. ¿Cuántas migrañas controlan definitivamente? Ninguna.
Nos encontramos ante la dictadura de la irracionalidad, la dictadura del pseudo oficialismo políticamente correcto. Lo que nunca se han preguntado además es si realmente quieren saber más, y en definitiva, que si duele, ¿PARA QUÉ DUELE? Ello implica no tener unos mínimos conocimientos sobre biología ni funcionamiento básico del organismo.
Espero que todo lo que se ha ido avanzando en el conocimiento del cerebro poco a poco se vaya extendiendo a la medicina, porque es verdadermante lamentable y descorazonador.Estoy convencida de que cuando pasen los años las generaciones venideras se pondrán las manos en la cabeza al saber qué teorías y conocimientos se continuaban aplicando en medicina en el S. XXI.
Creo que este blog es una de esas joyas, como una especie de la piedra de Rosetta.
Saludos a todos y un abrazo doctor.

legemcruz dijo...

Por favor, no se desanime. Los liberados lo necesitamos y cada vez somos más.
Gracias por su esfuerzo.
Cruz.

arturo goicoechea dijo...

LOURDES: no hay el más mínimo indicio de "vida inteligente" en el planeta oficial del dolor y resulta ciertamente descorazonador pero a la vez apasionante...

Un abrazo

arturo goicoechea dijo...

legemcruz: no me desanimo sólo que siento rabia por comprobar cómo hasta los propios padecientes miran para el lado equivocado 8en mi opinión, por supuesto).

Me encanta el término liberación. Lo prefiero al de curación. Ya me has facilitado la entrada para mañana...

Un abrazo

Carlos dijo...

He leído esto al mediodía y llevo pensando a ratos qué contestar. He tenido una reacción como las de los comentarios anteriores: "vaya, está desanimado". Como no soy un liberado, sino encadenado, y sólo tengo mi esperanza, no puedo proclamar que aquí esté la salvación. Sí puedo proclamar que no hay absurdos, es congruente con la ciencia actual y mucho más congruente en general con la experiencia de los pacientes que otras explicaciones. También se puede proclamar que, dentro del género divulgación científica, este doctor tiene muchísimo talento literario --y se agradece en tiempos tan iletrados. Se me ocurre que si tienes razón, en todo o en parte, la razón acabará abriéndose paso, independientemente del poder de convocatoria que tengas ahora. Los dos párrafos finales exploran posibilidades contrapuestas, como si después del primero, algo dogmático, abrieras otra puerta. El primero dice: "o tu o yo y no vale en medio". El segundo matiza, "bueno, sólo vale en medio si los dos tienen defectos... pero si sólo falla uno, más vale huir de él".
Yo veo posibilidades a esa vía media: "Mire, su cerebro tiene disfunción evaluativa del peligro (está algo atontao, vamos)" "Y qué debo hacer?" "¿Es Vd. luchador?" "Sí, lo que sea" "Pues lea esto de los caballeros del doctor Arturo y luche". O bien: "¿Luchar? Deme un medicamento contra la disfunción esa". "Mire, la disfunción no la curamos, pero podemos inhibir la respuesta de CGRP etc. con fármacos" "Pues venga" "Seguirá de por vida, le advierto, a no ser que encontremos una forma de inhibir la respuesta de manera permanente..." "Ah, sí, sí, démelo" "No se ha inventado aun. Estan en ello". En esta fantasía, no triunfas porque sustituyas la farmacia por pedagogía, sinó porque se acaba admitiendo esta otra posibilidad. En este planteo, la cosa está entre ser algo heroico (épica) o algo villano (quizás picaresca). Es otra manera de enfocar las antípodas.
Saludos

SM dijo...

Quizá, para ser un "liberado" como dice carlos tienes que estar proximo a la desesperación, como estaba yo después de años de medicarme a tope sin pocos resultados.Cuando uno tiene un ataque de migrña lo único que desea es algo para que ese horrible dolor desaparezca, si tomas una pastilla y se te pasa, no pides mas y no quieres oir otros "discursos".En mi desesperación, cuando por casualidad entre en el blog y leí el libro de Arturo senti como un "chispazo" (no se como llamarlo) y me puse manos a la obra.Dejé toda la medicación y la mejoría fué notable.He tenido alguna migraña soportable y sigo en la brecha.Llevo 5 dias que por la mañana aparece una ligera migraña y yo sigo calmando a mi cerebro y con mis tareas y para la noche va desapareciendo.Resulta algo dificil porque el miedo a que todo empiece de nuevo sigue todavía "agazapado" pero sigo convencida de que la única manera de librarme de él es la buena información para quitarme el lastre de la mala información de años.Gracias y ánimo para todos.
Un saludo

Arturo Goicoechea dijo...

Carlos: la eficacia de los fármacos en la migraña es bastante modesta. Puede que, sin el efecto placebo, la cosa quedara en nada. El problema no reside sólo en su eficacia parcial sino en que potencia la estructura fóbicoadictiva, que, en mi opinión, es clave en esta cuestión.

Hay padecientes con pocas crisis, controladas bien con el ritual farmacológico pero sospecho que son los menos. Las historias de la migraña son tremendas, mucho más tremendas de lo que los neurólogos acostumbran a describir. La ayuda profesional tampoco es tan brillante.

En mi opinión la doctrina oficial es parte sustancial del problema.

Saludos

Arturo Goicoechea dijo...

SM: no resulta fácil plantarle cara a un cerebro instruído en la teoría oficial. Los sistemas de memoria tienen mucha inercia y, siempre tenderán a reorganizarse con expectativas y creencias de otras épocas.

Tienes razón en que la desesperación, el que a uno los fármacos le hayan abandonado, ayuda a dar el paso y arriesgarse a cambiar de enfoque. Si se dispone de un ritual analgésico "eficaz" resulta más complicado renunciar a él.

Saludos