Desde la perspectiva de que el dolor proviene siempre de allí donde se siente y que si duele tras la actividad, estamos cansados aun sin habernos esforzado, dormimos poco y mal y no recuperamos energía ni reposo muscular, es lógico que concluyamos que el dolor generalizado es cosa "músculoesquelética". Sólo queda palpar los músculos para desenmascarar y objetivar el cuerpo del delito. Si palpamos músculos y obtenemos 11 puntos dolorosos la cosa está clara: es fibromialgia.
Son los músculos. Para los padecientes está claro. No dan la talla. Están doloridos, desfondados, sin energía, sensibles, inflamados. Hay que recuperarlos con ejercicio pero con extrema delicadeza, sin excesos.
¿Cómo empezó todo?
- A raíz de un accidente, un idiota que nos dio por detrás en un semáforo en rojo.
- Era una época de mucho estrés...
- La columna. Artrosis...
- Así sin más...
Los expertos buscan y describen sutiles variaciones químicas en músculos y terminales nerviosas de los nociceptores (las neuronas vigilantes del daño). Allí hay tomate. Donde duele hay pruebas evidentes de anormalidad.
Hay evidencias también de que el sistema nervioso está hipersensible. Cierto, pero ello es debido al bombardeo al que es sometido desde los focos de dolor muscular. Es fundamental identificar y silenciar los zulos de señal nociceptiva, lugares ocultos de los que surge el escape del dolor que ceba la red neuronal y la mantiene en vilo.
Masajes, relajaciones, ejercicio suave y progresivo, punciones en puntos miofasciales, toxina botulínica, desinserciones, operaciones... Todo aquello que apague el fuego continuo muscular será beneficioso.
Fundamental la lucha con el estrés. Nada de estrés. Contractura músculos. Nada de dolor. El dolor estresa. Prohibido.
Necesario también el sueño conciliador, reparador. Prohibido el insommio.
Al músculo hay que tratarlo con todo mimo. Alimentarlo sin tóxicos. Dieta sana.
Actitud positiva ante todo. Abnegación. Entereza. Conciencia de enfermedad. Esperanza. Optimismo. Incluso orgullo si hace falta.
Fármacos. Agujas. Homeopatía. No curan pero alivian.
El ánimo alto, aunque caigan chuzos de punta. Nada de deprimirse. Antidepresivos si hace falta.
¡Todos con el músculo! Necesita apoyo, mimos, aliento.
Las fibras musculares son células hiperexcitables por derecho propio. Si el ambiente no es el adecuado se contraen creando círculos viciosos. Si la tarea no es la adecuada sufren la sobrecarga, el maltrato. Hay músculos "cenicienta". Son los que cargan con todo. Las tareas de la modernidad no son las más adecuadas. El ordenador... Las cervicales de los sapiens (ma non troppo) no se sabe para qué están seleccionadas pro no para esta maldita vida moderna. ¡Qué decir de las lumbares! ¡Por qué no seremos cuadrúpedos! El bipedismo nos ha pasado una factura excesiva. Manos libres con pulgar oponente, sí, está bien... pero qué me dice del lumbago...
Urge proteger el músculo desde la infancia. Hay niños con fibromialgia. Vida músculosaludable. Ya tenemos las propuestas cardiosaludables. El corazón es también un músculo. Hagamos lo mismo con los demás. Estiramientos. Una hora antes de cada partido y otra hora después. Los chavales tienen que adquirir hábitos adecuados.
No hay duda. Es la hora del músculo. Lo necesitamos fuerte, energético, relajado, reposado...
- ¿Cerebro, dice?
La década del cerebro ya ha pasado. Nos ha dejado un montón de fármacos nuevos, caros, alarma social por el Alzheimer y el Parkinson, promesas... y más sufrimiento. Más dolor, más desánimo, más cansancio, más insommio.
- ¿Neuronas? ¿Son células?
Cuando en el embrión aparecen las primeras neuronas, contactan con las fibras musculares y ya nada será igual para ellas. Recibirán órdenes.
El músculo es un mandado. Sí, el cerebro es el que manda.
Fibromialgia, ¿cuestión de músculo? ¿cuestión de cerebro?
Usted misma...
4 comentarios:
Cuestion de cerebro!!
Desde que descubri su blog hace meses, casi no tuve la menor duda, el cerebro es el causante de la fibromialgia.
Hubo un tiempito que mejore muchisimo, hasta pense que estaba curada, pero.... zaz!! se me presentaron dos situaciones estresantes y nuevamente mal.
Aun asi no dejo de hacer ejercicio todos los dias.
Como dice Ud, mi cerebro se niega a tirar la toalla.
Volvi a tomar la fluoxetina y el coxib... es la segunda vez que siento que no me van bien, es mas, siento que me agudizan los dolores musculares.
Los dejare pues no siento mejoria.
Me he dado cuenta que mi cerebro yo somos recontra hipocondriacos.
Ayer le di una miradita a uno de los foros en que estuve y lei acerca de una chica que por una artrosis en la cadera y una necrosis avascular, a los 33 anhos, tuvo operaciones de cadera.
Y resulta que a mi ya me esta doliendo la artrosis incipiente que tengo. Es de espanto como se puede uno sugestionar.
Seguire tratando de librarme de la mandoneria de mi cerebro...ahora estoy aprendiendo meditacion, espero que me ayude.
Gracias por leerme Dr. y por favor, sigame apoyando con algunos consejos.
Un saludo.
El cerebro es el causante de la fibromialgia.
Yo lo relacionaría con el hastío de vivir que produce el cambio del rol de la mujer en la sociedad.
La mayoría de los pacientes con fibromialgia son mujeres. Muchas cuidan de niños deficientes, maridos discapacitados, padres, suegros... o tienen trabajos no remunerados.
Yo relacionaría la fibromialgia con el hecho de ver que las mujeres jóvenes tienen estudios, trabajan, son libres de dejar a su novio, cambiar de coche, postergar la maternidad y sentirse bien incluso después de un ligue de fin de semana.
En cambio las madres babyboom, fibromialgicas ha sido esclavas y no se valora que se pegaran a un primer novio considerando la idea de tener un segundo (en caso de que el primero saliera rana) como una perversión, se esclavizaron en casa, dejando sus estudios, su realización personal. Olvidaron la cultura por la televisión basura. Han vivido una sexualidad masculina que no las ha satisfecho, su cuerpo ha envejecido mientras la tele solo muestra una tiranía de la perfección que incluye juventud eterna de la mujer.
Cada día se miran pensando que están enfermas, que a su cuerpo que envejece le pasa algo. Que se cansan de cualquier tarea monótona, aburrida, si premio alguno (como las tareas del hogar o trabajar sin remuneración).
En contrapartida el hombre del babyboom tiene otro problema, que es la alexitimia: no es capaz de reconocer sus sentimientos, ni los de los demás. Está abotargado víctima de una sobredosis de futbol y programas concurso, convertido en una especie de crustáceo e incapaz de ver la insatisfacción de su mujer (o la suya propia) mientras se autocomplace.
Y resulta que es esa insatisfacción la que hace buscar en el cuerpo algo que esté mal. Considerar cualquier estímulo incómodo una enfermedad. Porque la única asistencia disponible es el médico (ya nisiquiera el cura y desde luego jamás un psicólogo o un psiquiatra porque se niega la insatisfacción)= "mi matrimonio va bien, es un matrimonio normal". "Mis hijos están fuera de casa, es lo normal". "He cuidado a mi suegra, es lo normal que hay que hacer".
Y lo que no consiera normal es estar cansada al volver del trabajo o cansada después de hacer la limpieza. Cansarse más que hace 20 años con la misma tarea, y tener menos ganas de hacer cosas nuevas. O seguir cansada después de una siesta de 3 horas de la que no encuentra fuerzas ni motivación para levantarse.
Esa es la génesis de la fibromialgia.
Ani: ya he advertido en algunas entradas del blog que el cerebro no tira nada y que en los circuitos que han estado operando y generando dolor queda siempre abierta la posibilidad de su reactivación. La existencia de contratiempos, cambios etc facilita la reactivación de las alertas y adicciones. Hay que ser conscientes de que eso es así y volver a defenderse con la racionalidad, la convicción de que no hay enfermedad.
Sucede lo mismo que con los hábitos, como el tabquismo. Con situaciones de estrés podemos volver a fumar y reconstruir la dependencia. El tabaco seguirá siendo un tóxico adictivo que engaña al cerebro y potencia las ganas de fumar crónicas. Si uno quita las ganas de fumar encendiendo cigarros el problema no se soluciona. Las ganas de fumar se quitan dejando de encender cigarros.
La anécdota de tu amiga demuestra que eres una persona empática. Eso es una cualidad que potencia la socialización pero te hace más vulnerable a activar de forma sensible programas alarmistas.
Saludos
Anonimo: en mi opinión la gestación y eclosión del síndrome fibromiálgico contiene una narrativa individual en la que confluyen muchos factores que interactúan de forma variable en tiempo y espacio, incluido el azar.
Todo lo que apuntas en el comentario puede influir pero, en mi opinión, no es un sustrato necesario ni suficiente.
Mi posición de análisis de la fibromialgia es el que reflejan los contenidos del blog: una visión celular, biológica, desde el organismo como ente cuidador de la integridad física celular.
Puede que mis puntos de vista estén sesgados hacia esa visión pero creo que el factor cultural es de mucho peso, no sólo en la asignación de un rol social sino en la idea de organismo y enfermedad.
Hay pacientes que han mejorado rápidamente sólo con disponer de la explicación biológica, cognitiva, de sus síntomas. Otras no han mejorado y puede que pudieran beneficiarse de un abordaje, digamos, psicosomático, contemplando la somatización como perturbación central. En otras el enfoque de somatización ha resultado perjudicial y la visión orgánica (evaluativa cerebral) del problema les ha sacado del atolladero.
En cualquier caso pienso que todas las reflexiones sobre génesis de la fibromialgia se verían beneficiadas por las aportaciones neurobiológicas sistémicas modernas.
Saludos
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